Con la creación y el desarrollo de la BAL (Basketball Africa League), la NBA está invirtiendo mucho dinero en África. Cada vez más jugadores de baloncesto de élite son africanos o tienen orígenes africanos. La prueba es el título de MVP otorgado en 2023 a Joel Embiid, el pívot camerunés de los Sixers. Pero este jugador All-Star no es el único que destaca en la Gran Liga. Hay otros atletas africanos que han tenido o están teniendo carreras impresionantes en la NBA. Aquí hay una selección.
Dikembe Mutombo
Dikembe Mutombo es uno de los jugadores de baloncesto africanos más icónicos en la historia de la NBA. Nacido en 1966 en Kinshasa, República Democrática del Congo, Mutombo es conocido por ser uno de los mejores defensores de la liga. Además de su altura (2,18 m), su envergadura y su sincronización le permitieron ser uno de los mejores bloqueadores de todos los tiempos. Su celebración, moviendo el dedo después de un bloqueo, se ha vuelto legendaria. Mutombo fue seleccionado ocho veces para el All-Star Game y fue nombrado Jugador Defensivo del Año en cuatro ocasiones.
Hakeem Olajuwon
Originario de Nigeria, Hakeem «The Dream» Olajuwon es indiscutiblemente uno de los mejores jugadores de baloncesto africanos que han jugado en la NBA. A pesar de comenzar tarde en el baloncesto, su progreso fue rápido. Seleccionado en la primera posición del draft de la NBA de 1984, tuvo un impacto inmediato con los Houston Rockets. Su agilidad, potencia y técnica lo convirtieron en un pívot dominante. El «Dream Shake» se convirtió en su movimiento característico. Hakeem llevó a los Rockets a dos títulos consecutivos de la NBA en 1994 y 1995. A lo largo de su carrera, fue elogiado por sus habilidades en la cancha, así como por su liderazgo y humildad fuera de ella. En 2008, Hakeem Olajuwon fue incluido en el Salón de la Fama.
Joel Embiid
Originario de Camerún, Joel Embiid se ha establecido como un jugador dominante en la NBA. Se unió a la liga en 2014, siendo seleccionado en la tercera posición por los Philadelphia 76ers. A pesar de un comienzo de carrera marcado por lesiones, este pívot ha demostrado una resiliencia y determinación notables para convertirse en uno de los mejores jugadores interiores de su generación. Con un juego de pies excepcional, buena visión de juego y un tiro fiable desde media distancia, Embiid desafía los estereotipos tradicionales de los pívots. Su personalidad exuberante y su sentido del humor son muy apreciados por los fanáticos. Embajador del baloncesto africano en la NBA, Joel Embiid es un ejemplo a seguir para los jóvenes talentos del continente que aspiran a seguir sus pasos.
Pascal Siakam
Siakam es uno de los mejores jugadores de baloncesto africanos en la NBA. Sus humildes comienzos en Douala, donde comenzó a jugar al baloncesto relativamente tarde, contrastan con su rápida ascensión en la liga norteamericana. Seleccionado en la 27ª posición del draft de la NBA de 2016 por los Toronto Raptors, este ala-pívot camerunés superó todas las expectativas. En pocos años, pasó de ser un jugador de rotación a convertirse en All-Star. También fue una pieza clave en la conquista del título de la NBA de los Raptors en 2019. Su tamaño, velocidad, agilidad y envergadura le permiten defender diferentes perfiles de jugadores. Ofensivamente, sus habilidades físicas y técnicas lo convierten en un jugador interior difícil de detener. El recorrido y la ética de trabajo de Pascal Siakam son una inspiración para muchos jóvenes africanos que aspiran a una carrera en el baloncesto.
Josh Okogie
El nigeriano Josh Okogie es uno de los talentos africanos más prometedores en la NBA. Desde su debut en 2018, Okogie ha demostrado un compromiso defensivo inquebrantable y una energía contagiosa en la cancha. Sus cualidades atléticas le permiten competir con los mejores jugadores de la liga. Además de sus contribuciones en la cancha, Josh es un orgulloso representante del continente africano y nunca pierde la oportunidad de destacar sus raíces. Su participación en competiciones internacionales con el equipo de Nigeria refleja su amor por la camiseta de su país de origen.
Jonathan Kuminga
Un joven jugador con gran potencial, el congoleño Jonathan Kuminga representa el futuro del baloncesto africano en la NBA. Nacido en 2002, Kuminga hizo su debut profesional en los Estados Unidos con el equipo Ignite de la NBA G League antes de dar el gran salto a la NBA al año siguiente. Kuminga tiene cierta versatilidad en la cancha; puede atacar el aro, tirar con precisión desde el exterior y defender múltiples posiciones. Este alero es uno de los prospectos más prometedores de su generación. Su carrera en la NBA apenas está comenzando, y parece brillante.
Bismack Biyombo
Originario de la RDC, Bismack Biyombo se ha destacado en la NBA gracias a sus cualidades físicas y defensivas, a pesar de tener capacidades ofensivas limitadas. Su determinación y energía contagiosa lo han convertido en un jugador en el que los entrenadores pueden confiar, lo que explica la longevidad de su carrera en la NBA. Biyombo ha superado la marca simbólica de diez temporadas en la Gran Liga. Más allá de su rendimiento deportivo, la séptima elección del draft de 2011 también es conocida por sus iniciativas filantrópicas en África, trabajando por la educación y el bienestar de los jóvenes. Su trayectoria ilustra perfectamente cómo los talentos africanos pueden brillar al más alto nivel.
Serge Ibaka
El congoleño Serge Ibaka es una de las figuras emblemáticas del baloncesto africano en la NBA. Nacido en Brazzaville en 1989, superó una infancia marcada por la guerra y la tragedia. Ibaka es conocido principalmente por sus habilidades defensivas, especialmente como bloqueador. A lo largo de su carrera, ha sido citado entre los mejores defensores de la temporada en múltiples ocasiones. Este pívot, que también puede jugar como ala-pívot, ha sido dominante durante casi una década. Jugó notablemente en OKC junto a Kevin Durant y Russell Westbrook, y fue un actor importante en el título de la NBA de los Toronto Raptors en 2019, ofreciendo a la franquicia su primer título de campeón de la NBA.
